La medida forma parte del nuevo Código Penal impulsado por el gobierno de Javier Milei.
La iniciativa, enmarcada dentro del plan de “tolerancia cero” del gobierno de Javier Milei, busca endurecer las sanciones por delitos callejeros y reducir la reincidencia. Según explicó Bullrich, el objetivo es enviar un mensaje claro de que “el delito tendrá consecuencias severas”.
El proyecto, que será remitido al Congreso, también contempla agravantes para casos de violencia o participación en grupo. Desde el Ministerio de Seguridad señalan que el aumento de penas busca dar respuesta a una de las principales demandas ciudadanas: la inseguridad urbana.
Si el texto es aprobado, el robo de objetos personales como celulares o carteras podría pasar a tener una de las penas más altas dentro de los delitos comunes, con un máximo de hasta doce años de prisión.
Félix Eduardo Cañizalez

