Durante la cumbre del Mercosur realizada en Foz de Iguazú, un grupo de seis países latinoamericanos emitió una declaración conjunta en la que exigió al régimen de Nicolás Maduro el restablecimiento del orden democrático en Venezuela y el respeto a los derechos humanos.
En el documento, los gobiernos firmantes reclamaron la liberación de los presos políticos, el respeto al debido proceso y el cese de las detenciones arbitrarias, subrayando la necesidad de una salida pacífica y democrática a la crisis venezolana.
Asimismo, recordaron que Venezuela continúa suspendida del Mercosur por el incumplimiento de los compromisos democráticos asumidos al integrar el bloque regional.
Brasil y Uruguay no suscribieron la declaración, lo que evidenció diferencias internas dentro del Mercosur respecto a la postura frente al gobierno de Maduro.
La iniciativa fue bien recibida por sectores de la oposición venezolana, que destacaron el respaldo internacional como un gesto clave para mantener la presión diplomática en favor de una transición democrática en Venezuela.
Félix Eduardo Cañizalez

